Hasta hace poco se creía que eran un mito, pero son de verdad. Son criaturas parecidas en forma a los calamares comunes pero con una diferencia de tamaño descomunal, llegando a pesar 300 kg y a medir hasta 15 metros, aunque algunas fuentes indican que pueden llegar a los 30 metros.
Son de un color rojizo y usan los tentáculos para cazar peces y crustáceos. Tienen tres corazones y un cerebro altamente desarrollado.
La primera vez que se lograron filmar especímenes en libertad fue en 2012 por el Discovery Channel y la NHK cerca de la costa de japón.
Aunque generalmente se suele pensar que los cachalotes son presa de los calamares gigantes, es al contrario, los cachalotes bajan a las profundidades para cazarlos dando lugar a luchas titánicas.